miércoles, 22 de julio de 2009

WING CHUN KUEN, La historia.


Hola, Amigos soy, HUAN XHIN WONG.
Como ustedes, soy un practicante apasionado de las Artes Marciales, un eterno aprendiz que quiere compartir un poco de historia, conceptos e inquietudes. Les pido me acompañen a conocer los inicios del Wing Chun Kuen, un arte marcial de origen chino, demos un paseo por su corta pero muy colorida historia la cual ha llegado a nuestros días a través de la narrativa.
Esta es la historia contada por el último guardián del estilo, el Gran Maestro Yip Man.
Aproximadamente hace 250-300 años en la provincia de Fujian, vivía una monja budista llamada Ng Mui, discípula del monasterio de Shaolin y experta en Kung Fu. Considerada una de los cinco grandes maestros que escaparon con vida del incendio provocado al templo a manos de los soldados imperiales de la dinastía Ching.
El emperador Ching mandó destruir los Templos debido al miedo que tenía a que los monjes se pusieran en contra de sus reglas.
Así pues, Ng Mui cruzó tres estados y finalmente se asentó cerca de la frontera entre Yunan y Kwei Chow. En un lugar llamado Bak Hok Gwoon en la montaña de Chai. Para encontrar tranquilidad y paz de mente. Un día mientras disfrutaba de su paseo por la naturaleza, observó una pelea entre una serpiente y una grulla. Se acercó silenciosamente y allí fue inspirada por la escena de combate. Con una mente clara llegó a comprender la calma, suavidad y sentido del equilibrio de la grulla. Tomando de los movimientos de la serpiente su direccionalidad y teoría del ataque recto.
Aunque había obtenido grandes beneficios y entendimiento de esa lucha ella pensó que era inútil intentar pelear como los animales. Entonces aplicó estos conceptos y teorías al cuerpo humano.
Buscó en los puntos fuertes y apartó aquellos fallos que pudiera haber descubierto. Combinó su antiguo estilo de Gung Fu con las nuevas teorías, y organizó los nuevos conceptos.
Ng Mui, acostumbraba bajar al pueblo a realizar sus compras, fue allí en donde entabló amistad con Yim Yee y su hija Yim Wing Chun, con quienes compraba judías en su camino de vuelta del mercado.
A la edad de 15 años como era costumbre de aquellos días Yim Wing Chun ya estaba lista para el matrimonio; estaba prometida al señor Leung Bok Chau, un mercante de sal de la provincia de Fukien. La belleza de la chica atrajo la atención del bravucón local, quien intentó forzarla para que se casara con él.
Los malos tratos que de manera continúa recibía por parte de aquel bruto llegaron a preocupar a su padre, quien temeroso por ser un hombre de edad avanzada sabía que no podría defenderla. La noticia llegó hasta Ng Mui, quien compadecida por lo que sucedía decidió tomar a Yim Wing Chun como su discípulo. Ng Mui prometió enseñarle el arte que había desarrollado, de forma que fuera capaz de repeler a aquel bruto, y después de eso casarse con su prometido.
Desde aquel día Wing Chun siguió a Ng Mui todos los días para la práctica del Kung Fu. Cuando ella fue capaz de dominar las técnicas que Ng Mui le había enseñado, desafió y derrotó a aquel pendenciero local, quien le había dado ciertos problemas.
Después de esto, Ng Mui dejó a Wing Chun y comenzó con sus variados viajes por el país, solo después de haber hecho prometer a Yim Wing Chun que enseñaría el arte para ayudar a los patriotas a restaurar la Dinastía Ching y derrocar a la Dinastía Ming.
Después de que Wing Chun se casara, pasó su estilo a su marido Leung Bok Chau, quien a su vez lo pasó a Leung Lan Kwai. Leung Lan Kwai enseñó el arte a Wong Wah Bo, miembro de una "tropa" a bordo de una barca conocida como el "junco rojo“.
Entre los compañeros de Wong Wah Bo, en el Junco Rojo, había uno llamado Leung Yee Tai, quien habia aprendido la técnica del Palo Largo del cocinero del barco. Dio la casualidad que el cocinero de aquel barco no era otro que el Maestro Jee Seen del monasterio Siu Lam.
En los días antiguos, era común que dos expertos practicantes de Gung Fu, para progresar dentro del Arte decidieran intercambiar conocimientos y la estrecha amistad de Wong Wah Bo con Leung Yee Tei dio como resultado la incorporación de las técnicas del Palo Largo al sistema de Wing Chun.
Mientras tanto el “ Junco Rojo" siguió su viaje. Finalmente el barco llegó y ancló en la provincia de Fat San, Cantón.
Fue allí donde Leung Yee Tai se puso enfermo y fue presentado al doctor Leung Jan quien contaba con una gran reputación como médico.
Al mismo tiempo el Doctor Leung Jan era un entusiasta de las artes del Gung Fu. Pronto llegaron a ser amigos y Leung Yee Tai enseñó a Leung Jan todo el sistema entero de Wing Chun, incluyendo su especialidad, la técnica del palo largo. Una vez Leung Jan había dominado las técnicas y teorías del sistema desafiaba a muchos maestros y algunos de ellos iban a buscarle para pelear.
Esto fue mucho tiempo antes de que el nombre de Wing Chun y Leung Jan se extendiera y se hiciera famoso. Incluso hoy día en algunos sitios al Wing Chun se le conoce como el "Puño de Fat San".
Posteriormente Leung Jan decidió enseñar solamente a gente muy diestra y muy seleccionada. Entre esta gente estaban sus dos hijos Leung Bik y Leung Chun, un buen amigo llamado Fung Wah, otro llamado Chu Yuk Gwai y un conocido que tenía un negocio de cambio de moneda llamado Chan Wah Soon, también conocido por Jow Chin Wah. Entre toda esta gente el que más dedicación y ansias ponía era Chan Wah Soon. Cuando el Doctor Leung Jan murió, fue Chan Wah Shun quien tuvo la responsabilidad de llevar el Arte que había aprendido. Él era el heredero del Wing Chun.
A Chan Wah Soon le llegó un joven deseoso de aprender el Arte del Wing Chun, su nombre Yip Man.
Yip Man, pertenecía a una rica familia muy respetada y honrada, sin embargo, a pesar de que las cuotas del Maestro Chan eran muy caras utilizó su propio dinero para pagar las cuotas y entrenó con el Maestro Chan hasta la muerte de este.
Después Yip Man continuó estudiando con sus superiores, especialmente con uno llamado Ng Jung So quien le había ayudado mucho a comprender lo que sabía de este arte.
Yip Man dejó Fat Shan para marchar a Hong Kong donde debería estudiar inglés y materias relacionadas con los negocios. Se apuntó al Sanit Etevens College, en donde, a pesar de ser sólo un adolescente, probó que era el mejor peleador del Colegio. Por el mismo tiempo, cuando Yip Man estuvo en Hong Kong, el hijo mayor de Leung Jan, Leung Bik estaba realizando una serie de negocios en aquella ciudad.
Leung Bik se enteró de que había un joven muy diestro en la lucha, a través de un familiar suyo pidió un encuentro con Yip Man. Cuando se encontraron Leung Bik acusó a Yip Man de ser "un busca problemas", especialmente cuando estaba fuera de la casa.
Leung Bik decidió probar a Yip Man y le dijo que su Gung Fu estaba todavía lejos de ser bueno. Naturalmente el joven Yip Man, que era físicamente excitable, se enfadó por esta afirmación. Antes del combate Yip Man estaba preocupado por la diferencia de edad que había entre ambos, pero nunca imaginó que el señor Leung supiera algo de su pasado con el Wing Chun Kuen.
Tres veces consecutivas Yip Man cayó al suelo cada vez que intentaba tocar a Leung Bik había encontrado la primera y única derrota de su vida.
Yip Man se dio cuenta entonces de que tenía mucho que aprender aún. Aparte de esto, tuvo la oportunidad de estudiar bajo la guía de muchos buenos maestros de Wing Chun. Con la ayuda de Leung Bik, se encargó de extender el Wing Chun al tiempo que estaba más cerca de la perfección del Arte.
Cuando estalló la 2ª Guerra Mundial ambos regresaron a Fat Shan, aunque Yip Man hizo muy poco en la provincia mencionada. Por un tiempo trabajó como detective en Jefe para la Estación de Policía de Fat Shan y llegó a ser muy conocido por la habilidad que tenía al apresar a delincuentes y personas fuera de la ley.
Yip Man volvió a Hong Kong en el invierno de 1949. Aunque no era excesivamente joven, comenzó una nueva vida intentando extender el Wing Chun en Hong Kong.
Por primera vez el Arte era enseñado públicamente fuera de China. En el corto tiempo de treinta años, el Wing Chun llegó a ser el sistema con más influencia no sólo en Hong Kong sino en todo el Mundo. Sin la dedicación de Yip Man, el Wing Chun con todo su valor como método de combate y Arte Marcial, podría haber permanecido detrás de la "cortina de Bambú" o haberse perdido.
El gran "hombre del Wing Chun", Yip Man, murió el 2 de diciembre de 1972 a la edad de 81 años.